Bloque 3: Virología y Estructura del VIH
Siguiendo con el análisis del VIH, nos adentraremos en la estructura del virus, un aspecto crucial en nuestra comprensión global de esta enfermedad. La estructura del VIH no solo nos ofrece perspectivas sobre su fisiopatología, sino que también arroja luz sobre los métodos diagnósticos empleados tanto en la investigación como en la práctica clínica diaria. Además, entender su compleja arquitectura nos permite abordar eficazmente los tratamientos antirretrovirales y nos proporciona una visión más clara de cómo hemos avanzado en nuestra batalla para erradicar esta enfermedad.
Virología
El VIH pertenece a la familia de los retrovirus, específicamente a la subfamilia lentivirus. Su característica distintiva es la transcripción inversa de su ARN viral a ADN viral, gracias a la actividad de la transcriptasa inversa.
Este virus se divide en dos tipos principales: VIH-1 y VIH-2. El VIH-1, más común a nivel mundial, se subdivide en grupos (M, N, O) y se clasifica aún más desde la subclase A hasta la J. Por otro lado, el VIH-2, predominante en África subsahariana, comparte similitudes genómicas con el virus de inmunodeficiencia en simios.
Además de su diversidad genética, tanto el VIH-1 como el VIH-2 presentan variaciones en su tropismo celular y en su capacidad de replicación, lo que influye en la progresión de la enfermedad y en la respuesta a los tratamientos antirretrovirales. Comprender estas diferencias es crucial para diseñar estrategias terapéuticas efectivas y personalizadas para cada paciente, así como para el desarrollo de vacunas y terapias innovadoras.
Estructura del Virus
La comprensión de las estructuras virales es esencial para entender el ciclo de vida del VIH, desde la infección inicial hasta la manifestación de síntomas. Por ejemplo, las proteínas de anclaje GP40 y GP120 facilitan la entrada del virus en la célula huésped, mientras que la transcriptasa inversa y la integrasa son responsables de convertir el ARN viral en ADN viral y de integrarlo en el genoma de la célula huésped. Más adelante, profundizaremos en cada uno de estos componentes.
- 2 cadenas de ARN viral
- ARN con nucleocápside P6/P7
- Transcriptasa Reversa o Inversa
- Integrasa
- Proteasa
- Cápside (P24)
- Core o Matriz (P17)
- Bicapa Lipídica
- Proteínas de anclaje (GP41 y GP120)

Las 2 cadenas de ARN viral son las moléculas de ácido ribonucleico que constituyen el material genético del virus. Estas cadenas llevan la información genética necesaria para la replicación y producción de nuevas partículas virales.
El ARN con nucleocápside P6/P7 es una estructura proteica que envuelve y protege el ARN viral en el interior de la partícula viral. Proporciona estabilidad al material genético del virus durante la replicación y la infección celular.
La Transcriptasa Reversa o Inversa es una enzima clave en el ciclo de vida del VIH. Su función principal es convertir el ARN viral en ADN viral, lo que permite la integración del material genético viral en el genoma de la célula huésped.
La Integrasa es otra enzima crucial para el VIH. Después de que la transcriptasa inversa convierte el ARN viral en ADN viral, la integrasa facilita la inserción del ADN viral en el ADN de la célula huésped, lo que permite que el virus se replique dentro de la célula infectada.
La Proteasa es una enzima que juega un papel fundamental en la maduración de las partículas virales. Corta las proteínas precursoras virales en fragmentos más pequeños y funcionales, lo que permite la formación de nuevas partículas virales maduras y contagiosas.
La Cápside (P24) es una estructura proteica que forma la capa externa de la partícula viral. Proporciona protección al material genético del virus y ayuda en su entrada en las células huésped durante la infección.
El Core o Matriz (P17) es una estructura proteica que rodea el material genético del virus dentro de la partícula viral. Contribuye a la estabilidad y estructura de la partícula viral, además de facilitar la entrada del virus en las células huésped.
La Bicapa Lipídica es una capa de lípidos que rodea la partícula viral y le confiere estabilidad y protección. Esencialmente, es la envoltura externa del virus que le permite interactuar con las membranas celulares durante la infección.
Las Proteínas de anclaje (GP41 y GP120) son proteínas de superficie viral que facilitan la unión y la entrada del virus en las células huésped. GP120 se une a los receptores en la superficie de las células huésped, mientras que GP41 ayuda en la fusión de la envoltura viral con la membrana celular, permitiendo la entrada del virus en la célula.
Pregunta tipo MIR
Una de las siguientes propiedades referidas a los virus RNA es cierta:
- La mayoría de ellos se multiplican en el núcleo.
- La estructura del genoma no es determinante del mecanismo de transcripción y replicación.
- No es necesario que codifiquen RNA polimerasas RNA dependientes.
- No muestran tendencias a las mutaciones.
- El genoma RNA (+) de los retrovirus se convierte en DNA, que es integrado en la cromatina del huésped y transcrito como un gen celular.