Crisis hipertensivas

Publicado por Dr. Juan S. Guarin | Actualizado: Abril 2025

Portada Hipertensión Arterial ENARM

La Guía de Práctica Clínica (GPC) mexicana define una crisis hipertensiva como la presencia de PAS ≥ 180 mm Hg y/o PAD ≥ 120 mm Hg. Esta entidad abarca dos escenarios:

  • Urgencia hipertensiva: sin disfunción aguda de órgano blanco (DOB).
  • Emergencia hipertensiva: con disfunción aguda de uno o más órganos.

Solo el 1 – 2 % de los pacientes hipertensos sufrirá una crisis hipertensiva. De ellos, aproximadamente 24 % serán emergencias y 76 % urgencias.

1. Evaluación inicial

  1. Historia y síntomas: cefalea, dolor torácico, disnea, mareo, epistaxis, déficit neurológico.
  2. Exploración física: fondo de ojo, soplos, datos de IC, signos neurológicos focales.
  3. Laboratorio básico:
    • Biometría hemática.
    • Creatinina, urea, sodio, potasio.
    • CK, CK‑MB y troponina.
    • Examen general de orina.
    • Colesterol total y triglicéridos.
  4. Gabinete dirigido:
    • Electrocardiograma de 12 derivaciones.
    • Radiografía de tórax y ecocardiograma.
    • TC de cráneo simple si hay déficit neurológico.
    • Angiotomografía de tórax/abdomen ante sospecha de disección aórtica.

2. Lesiones de órgano blanco a descartar

  • Cerebro: EVC isquémico o hemorrágico, encefalopatía hipertensiva.
  • Corazón: síndromes coronarios agudos, insuficiencia cardiaca.
  • Grandes vasos: disección aórtica.
  • Riñón: lesión renal aguda, microalbuminuria.
  • Microvasculatura difusa (hipertensión maligna): retinopatía grado III‑IV, anemia hemolítica microangiopática, trombocitopenia.

3. Manejo de la urgencia hipertensiva

  • Atención ambulatoria cuando no existe DOB.
  • Iniciar, reiniciar o ajustar antihipertensivos de acción prolongada en las primeras 1 – 7 días.
  • Si reposo/ansiedad no bastan, elegir un agente oral de inicio rápido:
    • Clonidina 0.1 – 0.3 mg.
    • Captopril 25 – 50 mg.
    • Prazosina 5 – 10 mg.
    Administrar cada 30 min hasta control sintomático. Evitar nifedipino sublingual.
  • Alta cuando la PA se encuentre aproximadamente entre 160 – 180 / 100 – 110 mm Hg y los síntomas hayan mejorado.

4. Manejo de la emergencia hipertensiva

  1. Hospitalizar en unidad monitorizada.
  2. Iniciar infusión IV titulable de corta duración (nitroprusiato, nicardipino, labetalol, clevidipino).
  3. Meta: reducir la PA media ≤ 25 % durante la primera hora, evitando PAS por debajo de 100 – 120 mm Hg.
  4. Transición a antihipertensivos orales a las 6 – 12 h, solapando y retirando gradualmente la infusión IV.
  5. Normalizar cifras en 48 – 72 h salvo indicación específica.

Alerta: una reducción excesiva de la PA puede aumentar la mortalidad hasta en un 10 %.

5. Indicaciones de referencia a segundo nivel

  • Fracaso para controlar la PA con tres o más fármacos adecuados.
  • Pacientes jóvenes con hipertensión inexplicada.
  • Complicaciones crónicas graves (nefropatía, retinopatía, cardiopatía hipertensiva).

6. Puntos clave

  • Confirmar cifras con equipo calibrado y repetir en el otro brazo.
  • La ausencia de síntomas no descarta una emergencia.
  • Hipertensión maligna es siempre una emergencia: requiere tratamiento IV y oftalmoscopía.
  • Programar seguimiento estricto tras cada crisis hipertensiva.

7. Recursos adicionales

Lecturas recomendadas